Un 19 de febrero

Tú y yo nos conocimos un 19 de febrero. Lunes. En una cola. Frío. Mucha gente.

Para mí fue un día como todos los demás... sin relieve. ¿Quién me iba a decir que ese día aparecerías tú? Nadie. Alguien me dijo una vez, y creo que ya lo he dicho en alguna ocasión, que la vida se espera a darnos las cosas para cuando las sepamos apreciar.

Odio esperar y por eso odio esa frase. Pero, cuánta razón tiene... Apareciste en mi vida así, tal cual. Un lunes cualquiera. Ahora que rememoro todos los momentos que he pasado a tu lado, en este mes y doce días... me doy cuenta de que he sido la persona más feliz de este planeta, por un mes y doce días.

He aprendido a valorar a las personas y a mejorar como persona, a elegir y a despedirme, a llorar y a reirme. A amar, como sólo se ama una vez en la vida. Aún pienso en la razón por la cual me elegiste a mí... hay tantas personas en este mundo que se merecen tu amor...

Me siento especial, ¿sabes? Has sido lo más bonito de mi vida.

He releído las actualizaciones anteriores y he visto cómo ha evolucionado nuestra relación y no he podido no llorar... son bellísimas. Tengo que confesarte que se me había olvidado lo más importante; que esta semana estaba a prueba. Me he acordado sólo hoy cuando me lo has dicho y me he quedado de piedra. Así que quiero que sepas que mi comportamiento de esta semana ha sido completamente sincero y directo, he sido somo soy. Yo 100%. Ya te dije que cuando estoy contigo se me olvida todo...y supongo que ves que es cierto.

Mañana se deciden muchas cosas.Mañana cambiará todo. Mañana acaba el plazo.

Cuando cogía el metro pensaba en tí, como siempre. Y pensé que el día de mañana será muy importante ya que, como yo lo veo, habrá dos trenes. Tu cogerás y me vendarás los ojos, y después me sentarás en uno de los dos. Uno va hacia su destino contigo, y el otro sin tí.

Así veo el día de mañana. Un día que cambiará mi vida. ¿A mejor? ¿A peor? ¿Te volveré a ver? ¿Cuál será mi tren? No se sabe nada de nada. Sólo lo sabes tú.

Supongo que todos habéis sentido eso... la sensación de que no sabes qué va a pasar. Hoping for the best but expecting the worst diría una canción. Y pienso igual. Te prometí que no estaría nerviosa, pero...¿Cómo no estarlo cuando tu vida depende de la persona a la que amas? El ser humano necesita saber. Pero es una prueba durísima. Es confiar en tí totalmente, un 100%. Pero te lo he prometido. Y no estaré nerviosa, sólo expectante. Sólo esperaré.

Te quiero agradecer una vez más el que estés en mi vida, que hayas decidido compartirla conmigo. Gracias por los buenos días y las buenas noches, los besos, las caricias, los sueños, las horas y horas juntos, los abrazos, las frases importantes, las oportunidades, los perdones, los recuerdos, los momentos... por TODO. Por querer que sea yo esa persona para compartir tu vida.

He de pedirte perdón también, por ser una caprichosa, llorona, impaciente, débil, borde, infantil, dura, pesada ... y todas las cosas que he hecho mal y las promesas que he incumplido. Supongo que es porque nadie es perfecto. De los errores se aprende, y yo he aprendido mucho, mucho, mucho.

Te hice unas promesas, ¿recuerdas? ;No he cumplido ninguna de mis promesas, pero cumpliré tres; quererte siempre, no olvidarte nunca y estar ahí, hasta el final. O si existe, hasta el infinito.

Eso es lo que puse, y lo que haré. Nunca te podré agradecer lo suficiente todo lo que has hecho por mí. Eres mi pequeño gran mundo. Que sepas que respetaré la decisión que tomes. Otra promesa. Una más. Que sin duda alguna se cumplirá. Los franceses lo dirían muy bien... C´est la vie (Así es la vida) Sólo hay una cuestión abierta... ¿Habrá más promesas?

Te amo, Borja y te quiero más que ayer y menos que mañana. Gracias por ser mi ángel particular, personal e intransferible.

Gracias enamorad@s por estar ahí. Superad vuestras pruebas. Sed fuertes. Amad con todo el corazón y por favor,por favor, por favor... cumplid las promesas que decís que cumpliréis. ¡Un beso a tod@s!